10 de noviembre de 2010

Los Cuadrilleros

Un interesante artículo de José Cortés de los Ríos que, sin duda, pasa a engrosar la Historia de la Séptima Cuadrilla de judíos Colinegros.
LOS CUADRILLEROS


No existe constancia escrita de la existencia de cuadrilleros en los primeros tiempos de nuestra cofradía, hemos de esperar que transcurra doscientos nueve años para que las actas mencionen el referido cargo:

“Cabildo celebrado para la eleccion del Nuevo Quadrillero año 1798= En la Villa de Baena a los 25 dias del mes de Diziembre del año 1798 juntos los hermanos Nazarenos de la segunda Quadrilla de D. Feliz Padillo difunto nombraron Quadrillero por Muerte de dicho Señor a D. Estevan Navarro y Padillo como hermano mas antiguo y Hombre de buena conducta y virtudes como lo previene Nuestras Constituciones= y lo firmamos en esta Villa de Baena”

Parece desprenderse del anterior texto que los requisitos exigidos para ser cuadrillero eran buena conducta, varón virtuoso y ser el más antiguo de la cuadrilla. En el citado año 1.798 la Cofradía todavía sigue rigiéndose por las Constituciones de 1.589, en esta fecha no aparece en ninguno de sus veintisiete artículos llamados “constituciones” la figura de cuadrillero. Con la incorporación de nuevas hermandades y su división en cuadrillas, con toda seguridad, las referidas Constituciones recibieron alguna que otra modificación para adaptarlas a las nuevas circunstancias. Es en 1.860 cuando encontramos el cargo de cuadrillero perfectamente reglamentado en los estatutos del referido año.

“Constando esta Cofradía de barias hermandades habrá en todas ellas una ó mas cuadrilleros para el buen orden organización de la misma.
Los cuadrilleros serán los Gefes de sus respectivas cuadrillas cuyos cargos son honoríficos gratuitos y de libre aceptación…
Los cuadrilleros serán nombrados por los hermanos que componga la respectiva cuadrilla y estarán el tiempo de la voluntad de los nombrados ó el de la de los nominadores.”

Observamos algunas diferencias sustanciales con respecto a nuestro tiempo. Antes, el voto de los cuadrilleros en el Cabildo era personal, no votaban en representación de la cuadrilla como ahora recoge nuestros estatutos, la razón de ello es que hasta 1.926 todos los cofrades, cuadrilleros y no cuadrilleros, tenían derecho a votar en los cabildos, hoy, solamente tenemos voz pero no voto. En 1.879 hubo un intento fallido de los cuadrilleros de atribuirse ese voto representativo de la cuadrilla. En Cabildo General Extraordinario celebrado el 22 de mayo de 1.879 a petición de siete cuadrilleros, se expresaron de la manera siguiente: “que contando, como contaban, y de ello respondían, con la conformidad de sus respectivos hermanos en la renovación de la junta directiva, no se retirarían, ni abandonarían el local hasta que aquella se llevara a efecto, toda vez que con los concurrentes representaban casi la totalidad de la Cofradía.” El secretario de la Cofradía, el notario D. Manuel María Santaella, les recordó el artículo once de los estatutos de 1.860:

“Las juntas ó Cabildos generales ordinarios y extraordinarios se celebraran en el local que al efecto se señale por la Directiva y en aquellos tendrán voz y boto todos y cada uno de los hermanos. Para constituir junta ó Cabildo general se necesitan la reunión de la mitad mas uno de los hermanos que componen la Cofradía”

En 1.882 la Cofradía vio aumentar considerablemente el número de cuadrilleros a causa de la fundación de ocho nuevas cuadrillas en la Hermandad de Judíos, pasando de cinco a trece. Cada cuadrillero nombraba a un escribano, teniente cuadrillero y uno o varios citadores: “Será nombrado un citador por cada cuarenta hermanos o fracción de cuarenta”. Tanto cuadrilleros como tenientes cuadrilleros, citadores y escribanos no pagaban la limosna correspondiente. La Cofradía quiere que nadie se libre de pagar las llamadas cuotas de procesión, a excepción del citador. El Cabildo aprueba que no se nombren tenientes cuadrilleros, debiendo ser ocupado este cargo por el citador. Tampoco quería la Cofradía que los cuadrilleros nombraran a escribanos ni otros cargos exentos de pagar limosna, pues estas tareas eran consideradas propias del cuadrillero. Lo curioso del caso es que un número considerable de ellos era gente sencilla que no tuvieron la oportunidad de aprender a leer y escribir como queda patentemente reflejado al final de todas las actas de principio de siglo, donde aparece un apartado que dice:” a ruego de los que no saben firmar,” escribiendo el secretario de la Cofradía los nombres y apellidos de esos cuadrilleros que no pudieron aprender, ni siquiera, a estampar su firma.

A partir de principio de siglo XX se produce una serie de movimientos que hace que unos cuadrilleros cambien de cuadrillas, que ciertas cuadrillas desaparezcan y reaparezcan de nuevo y otras desaparezcan para siempre hasta quedar hoy en el estable número de ocho. El cuadrillero de la séptima cuadrilla, por ejemplo, D. Lázaro Bernabeu y Ferri, pasó a serlo de la quinta.

El tiempo de duración al frente de su cuadrilla era ilimitado y aunque el cargo era electo, lo habitual era que la cuadrilla pasase de padres a hijos, constituyendo auténticas dinastías. La zaga más tradicional en este aspecto la constituya la familia Segura, cuyos cuadrilleros han llegado hasta nuestros tiempos. El primero de ellos fue Juan Antonio Segura Rubio, elegido cuadrillero de la octava cuadrilla de judíos en 1.900. Hombre de gran autoridad. El acta del cabildo celebrado el día doce de abril de1908 dice: “Que los cuadrilleros Juan Antonio Segura Rubio y Félix Vallejos, sean los que este año han de ir encargados en que los judíos observen orden y disciplina en todas las procesiones”. En 1.909 la octava cuadrilla de la turba pasó a su hijo José María Segura Galvín que estuvo al frente de ella hasta 1.913 que fue dada de baja. En 1.925 es nombrado cuadrillero de la séptima cuadrilla, cargo que desempeña hasta su muerte ocurrida en 1.944, siendo nombrado su hijo Juan Antonio Segura Vives que ejerció el cargo de cuadrillero de la séptima durante treinta y ocho años. En la actualidad el cuadrillero de la referida séptima es desde el 2.006 su hijo Francisco Segura Bernal.

JOSÉ CORTES DE LOS RÍOS