19 de mayo de 2007

El Paso del Evangelista

Transcribimos aquí las notas y apuntes que se dieron en el
taller el Paso del Evangelista la pasada Cuaresma de 2007


EL BARROQUISMO EN LAS PROCESIONES

La llegada de la estética barroca a las cofradías penitenciales y el apogeo que experimentan durante los siglos XVII y XVIII son las causas por las que aparecen una serie elementos identificadores que desde las escenificaciones de ciertos pasajes de la Pasión del Señor, hasta los personajes vivientes que desfilarían en las procesiones para recordar la historia bíblica, pretendían instruir a un pueblo inculto que de esta forma asimilaba mejor la doctrina cristiana.Profetas, apóstoles, sibilas, virtudes, soldados del centurión y todo un compendio de representaciones sagradas llegaron a introducir en celebraciones religiosas como la Asunción de la Virgen, el Corpus Christi o la Semana Santa, un importante componente escénico.Baena no quedaría al margen de este fenómeno y al amparo de las hermandades pasionales se irían incorporando a las procesiones realizando en ellas pequeños actos teatrales, que aunque muchas veces se limitaban a simples gestos o ademanes, servían para dar a conocer de una manera más cercana los momentos más cruciales del cristianismo. De ese modo aparecerían los conocidos como “sermones del paso” que todavía hoy se siguen manteniendo en numerosas poblaciones, en los que a la voz de un sacerdote, una serie de personajes interpretaban escenas de la Creación del Género Humano, del Sacrificio de Isaac o del mismo Prendimiento de Cristo en el Huerto de los Olivos.Pero si se trataba de representar aquello que decían los textos sagrados, era lógico que también apareciesen en los desfiles penitenciales, las encarnaciones de aquellos que se encargaron de escribir los Evangelios aceptados por la Iglesia. De este modo, Mateo, Marcos, Lucas y Juan, se contarían entre las figuras bíblicas que desde un primero momento se incorporan a las cofradías de Semana Santa, portando pequeñas tablillas en las que simulaban escribir los textos santos.

Con el transcurrir del tiempo, al ademán de estos evangelistas se incorporarían los gestos de un miembro de la turba de judíos que simulaba averiguar lo que de manera temblorosa escribía el otro personaje, intentando arrebatárselo en una emulación de las primeras persecuciones a las que se verían sometidos los eguidores de Jesús por parte de los judíos.


José M. Cano de Mauvesín



COMO REALIZAR EL PASO


El Paso del Evangelista lo realizan las Cuadrillas de Judíos que ese año van de “Cajas y Banderas y Pasos y Fatigas”. Por tanto, tienen prioridad para realizar el paso los judíos adscritos a esas cuadrillas; no obstante y por cortesía, cualquier judío de una cuadrilla distinta a estas que quiere realizar el paso lo puede hacer. En uno y otro caso ha de pedir permiso a los Cuadrilleros de Cajas y Banderas que son quienes le asignarán el turno tras escuchar el toque de los Trompeteros.Al toque del Trompetero el Judío se baja la Celada, deberá procurar que la chaqueta esté correctamente abrochada y el pañuelo correctamente colocado.
Con la mano izquierda en el casco y la derecha a la espaldas se dirigirá con paso tembloroso al primer Evangelista. Colocado detrás de

el, se asomará por encima del hombre derecho intentado ver lo que escribe, dará dos o tres pasos atrás y se asomará por encima del hombre izquierdo intentando ver lo que escribe, dará dos pasos atrás para volver a asomarse por encima del hombro izquierdo.Viendo que es imposible leer lo que escribe el judío retrocede tres o cuatro pasos y se planta delante del Evangelista (SIEMPRE POR EL LADO DERECHO) quién esconderá la tablilla que está escribiendo. El Judío saca la mano derecha (la izquierda siempre en el casco) e indica al Evangelista que le quiere arrebatar la Tablilla iniciando una breve carrera que concluye con una reverencia del judío hacia el Evangelista.IMPORTANTE: Al entrar a asustar al Evangelista siempre tiene que ser por el lado derecho. Ello es debido a que los rostrillos están hechos de tal forma que es por ahí por donde ellos ven al judío. Si se entra por el lado izquierdo el Evangelista se queda parado ya que no ve al judío.





Juan Carlos Flores Cantero



NOTAS PUBLICADAS EN LA WEB DE LA AGRUPACION DE COFRADIAS



Uno de las tradiciones más peculiares de nuestra Semana Santa es el conocido”Paso o Baile” (”asustar a los evangelistas”) durante los defiles procesionales. Representado por cuatro personajes bíblicos, los cuatro evangelistas Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Delante de ambas turbas de Judíos van cuatro personas representado a los evangelistas, al toque de un trompetero estos se preparan y de espaldas a la Turba empiezan a figurar escribir el evangelio en unas tablillas que llevan, estos lo hacen de manera desconfiada, escondiendo lo que escriben en su pecho a la vez que miran a los lados vigilantes.
A la vez un Judío sale de la Turba sin tambor, con la celada bajada una mano en la espalda y otra sujetando el plumero y dando saltitos se acerca al evangelista por la espalda, el Judío intenta ver lo que escribe en dos ocasiones siempre empezando por la parte derecha y a la tercera que se acerca de un salto se planta delante del Evangelista que al verlo se sorprende y da unos pasos huyendo. Esto se repite a la ida y a la vuelta con los cuatro evangelistas y se realiza en todas las procesiones.


PUNTUALIZACIONES DE COMO REALIZAR EL PASO

Siempre había entendido que el judío cuando deja la turba atrás para realizar el paso del evangelista llevaba una mano en el casco, a la altura del bombín y la otra atrás. Este Jueves Santo conversando con José María Segura me comentó que, efectivamente, una mano la lleva en la espalda pero la otra la lleva a la altura del casco con dos dedos levantados y la mueve cuando entra a asustar.

En meses pasado publiqué en la web de la Agrupación los Resultados del Taller del Paso del Evangelista y un lector llamado Sergio dejó este comentario:

"...queria dar las gracias por esta iniciativa pero tambien decir que debemos de enseñar las cosas como son por ejemplo si observamos casi todo s lo que salen a efectuar el paso del evangelista observamos que suben su mano a la altura del bonbin del casco cogiendo con ella el plumero, algo que no es asi. Se que se hace por el susto de que no se valla a caer el mismo pero debo de decir que este si esta bien puesto no debe de caerse que para eso esta el bombín y la mano debe de ir suelta a la altura de la vista mas o menos y no sujentando ni el casco ni el plumero... un saludo para todos y animo con la iniciativa"

A este respecto los vídeos que hay publicados en la web de la Agrupación del año 68 y 65 confirman que, efectivamente, el Paso se hace así.

Dejamos estas notas aquí para quién esté interesado en el tema.